GENERALI nació con la denominación de IMPERIAL REGIA PRIVILEGIATA COMPAGNIA DI ASSICURAZIONI GENERALI AUSTRO-ITALICHE, a principios del siglo XIX, en la ciudad porteña de Trieste, cuando esta pertenecía al Imperio AUSTROHUNGARO, y era una localidad de gran importancia por su salida al mar. Su posición estratégica fue base de su expansión y su crecimiento ha estado ligado a la evolución histórica de Italia. Hoy en día constituye la mayor compañía de seguros de Italia y una de las principales de Europa. Su tamaño es tres veces el de MAPFRE, principal aseguradora española, cotizada en Bolsa.

Sus datos son proporcionales a su tamaño. Tiene más de 57 millones de clientes, en un grupo compuesto de 175 sociedades participadas, donde trabajan 71 mil empleados. Gestiona activos por 500 mil millones de euros entre sus propias inversiones y la cartera de sus clientes. De ellos 26 mil millones lo son en propiedades inmobiliarias.

Se encuentra presente en más de 60 naciones, aunque su principal fuente de ingresos los obtiene en tres mercados maduros, Italia, Alemania y Francia. En Italia, es la aseguradora de mayor tamaño en todas sus actividades. En Alemania, un mercado difícil, es la segunda aseguradora, aunque se encuentra con persistentes dificultades en el segmento de vida, debido a los extremadamente bajos tipos de interés durante un tiempo tan prolongado y en Francia, un país muy competitivo en el sector, ocupa el séptimo lugar.

En España tiene presencia desde 1934, con la denominación de GENERALI ESPAÑA y tiene una cuota de mercado sobre el global del sector del 3,3%, ocupando el octavo lugar por facturación. Para la captación de clientes utiliza múltiples estrategias que van desde la red propia, comercializadores externos, acuerdos bancarios y una JOINT VENTURE con la entidad financiera CAJA MAR.

GENERALI tiene expectativas de crecimiento tanto en América como en Asia, donde a pesar de tener presencia en Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Panamá y Estados Unidos o en China, Indonesia, India, Hong Kong, Vietnam, Tailandia, Filipinas, Malasia y Japón, estima que por su tamaño, puede aumentar su implantación y abrirse a nuevas naciones. Todo ello le permitirá crecer en un porcentaje superior a sus competidores. El incremento en la internacionalización de GENERALI ha supuesto que los ingresos provenientes de Italia, hayan representado el 36% en el año 2017, frente al  39% que fueron en el año 2012.

Como casi todas las grandes aseguradoras su negocio consiste en la venta de seguros de vida, que sirve al cliente como un complemento a una pensión pública, así como la rama de seguros de no vida, como los que cubren daños a propiedades, posible responsabilidad civil contra daños a terceros o lesiones personales que pueden traer consigo pérdidas en los ingresos de una familia. Por otro lado, presta especial atención al sector empresarial, teniendo una gama de productos que permite a las compañías gestionar los riesgos derivados de sus actividades comerciales e industriales.

Los resultados obtenidos en el año 2017, están en línea con los marcados para el ejercicio y suponen un incremento con respecto a los del año anterior, cumpliendo así el plan de negocio trazado en el año 2012, donde GENERALI atravesó una profunda crisis, que le hizo bajar sus resultados hasta los 94 millones de euros. El ejercicio 2017, se ha cerrado con unos beneficios netos de 2.110 millones de euros, lo que va a permitir un incremento en el dividendo a repartir del 6%, hasta llegar a la cifra de 1.330 millones. Estas cifras llevan a significar que entre los años 2015 y 2018, el grupo habrá devuelto más de 5 mil millones de euros entre sus accionistas. Todo ello, en una compañía que lleva 150 años retribuyendo resultados a sus socios.

La tasa de retorno de capital alcanzado en el año 2017 es del 13,4%, lo que le lleva a tener un ratio de solvencia del 208% frente al 178% que mostraba el año anterior. A pesar de que en el último ejercicio, tuvo que contabilizar en su cuenta de resultados unas pérdidas por tipos de cambio en monedas extranjeras en sus inversiones, de 2 mil millones de euros, frente a los 800 millones sufridos en el año 2016. También sus resultados netos se han visto perjudicados por la subida de su tasa impositiva, que aumentó al 31,8% en vez del 29,4% anterior. En total, GENERALI pagó en el año 1.280 millones en concepto de impuestos. El crecimiento de los resultados antes de las tasas impositivas en el último ejercicio fue del 16,4%.

Todos estos resultados de estos últimos años, se han producido como consecuencia de una política de ahorros implantada a finales del año 2012, que ha supuesto la reducción de 1.500 millones de euros en gastos corrientes. Para el año 2018, se espera aumentar esta cifra en 200 millones adicionales.

La mejora en las cuentas de la compañía no solamente se ha conseguido por la vía de los ahorros, que por supuesto, al final tienen un límite. Un cambio de mentalidad general, inculcando unos principios básicos, han contribuido a la creación de valor en la compañía. En el negocio básico, se ha intentado captar las necesidades reales de los clientes respecto a sus expectativas sobre sus seguros, se ha estado pendiente de las demandas solicitadas por los distribuidores de los productos para incrementar servicios y ventas y también, se ha seguido una línea de vender productos sencillos y fáciles de explicar, huyendo de aquello que suponga operaciones complicadas y por otro lado, se ha fomentado la agilidad en la red comercial y se ha invertido con eficacia en la innovación tecnológica. Los profundos cambios por las nuevas capacidades, han estado bien gestionados, lo que ha llevado a reducciones en los costos, aperturas de nuevos mercados y por lo tanto, una fuente para proporcionar mayores ingresos. Se ha trabajado perfeccionando el funcionamiento interno en la rápida identificación de situaciones de riesgo, la medición de los mismos, el control en la gestión y el reporte de sus consecuencias a la dirección, de forma inmediata.

Los resultados también han aumentado por la vía de los atípicos y desinversiones. Una mala planificación en el pasado ha llevado a GENERALI a realizar ventas en mercados donde su presencia era pequeña y con pocas posibilidades de crecer, y a realizar adquisiciones consideradas más convenientes. En México, donde su presencia era a través de una participación del 49% con socios locales, en 2013 se vendió su parte, materializando unas plusvalías de 500 millones de euros, tras haber invertido 149 millones.

GENERALI ha utilizado correctamente la figura del reaseguro como fórmula para medir los riesgos, sobre todo en aquellos mercados más inestables. Esta situación ha permitido tener un balance menos expuesto. Por otro lado, se ha visto beneficiada de la tendencia a la baja en los costos del mismo.

En los resultados que presenta GENERALI, se ve un crecimiento en la facturación en los seguros de vida del 1,8%, mientras las primas del resto de seguros, tienen una caída del 4,9%. Del beneficio operativo de 4.885 millones de euros, los seguros de vida aportan el 65% del total.

Sin embargo, dado el panorama macroeconómico y financiero, donde en los principales mercados donde opera la compañía, existen bajos tipos de interés, que penalizan el sector de vida, GENERALI tiene que apostar por fomentar el crecimiento en los seguros de no vida, sobre todo teniendo en cuenta la previsible mejora económica que está viviéndose en  la Eurozona.

GENERALI tiene una fuerte implicación en la comercialización de los productos ofrecidos por EUROPASSITANCE, especializada en ofrecer servicios relaciones con viajes y asistencia en carretera, lo que le permite prestar servicios adicionales a sus clientes.

El tamaño y complejidad del GRUPO GENERALI, implica que los honorarios de su auditor, la compañía EY, sea por todos los conceptos facturados de 18 millones de euros por sus trabajos en Italia, incrementándose en 23 millones más, teniendo en cuenta toda la red internacional de la sociedad.

En cuanto a su composición accionarial, GENERALI cuenta con 231 mil accionistas minoritarios que representan el 26,70% del capital total. Otro 42,25% se encuentra en manos de fondos e inversores institucionales. Los accionistas de referencia en la gestión son MEDIABANCA con el 13,03% y los grupos CALTAGIRONE y LEONARDO DEL VECCHIO con un 3,55% y un 3,16% respectivamente.

CALTAGIRONE es una sociedad cotizada en la Bolsa de Milán, constituida como holding donde se agrupan participaciones en compañías financieras, inmobiliarias y publicaciones entre otras inversiones, mientras el GRUPPO VECCHIO es dueño de LUXOTTICA, el mayor fabricante de gafas y lentes del mundo.

Los datos financieros más importantes del GRUPO GENERALI, se muestran a continuación en los cuadros confeccionados. En ellos se ve su clara mejoría y la importancia de la compañía en el sector asegurador.

DATOS RELACIONADOS